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Dublin Castle
Accesible en silla de ruedas
Apto para niños
Relajante y panorámico
Auténtico local
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Hasta 3 horas

Dublin Castle

En pleno centro de la capital, el Castillo de Dublín combina grandeza y valor, historia y pompa. No es solo un castillo: es el lugar donde se han desarrollado siglos de la vida política irlandesa, desde los reyes medievales hasta los presidentes modernos.

Un castillo que dio forma a una nación

El castillo de Dublín se fundó a principios del siglo XIII por orden del rey Juan de Inglaterra. Se erigió en el emplazamiento de un asentamiento vikingo y sirvió de fortaleza, tesorería, tribunal y sede de la administración británica en Irlanda durante más de 700 años.

Aunque sólo se conserva una de sus torres medievales originales -la Record Tower-, lo que se ve hoy es una sorprendente mezcla de estilos arquitectónicos. Desde la opulencia georgiana hasta la cantería medieval, el castillo refleja las capas de historia que han dado forma a Irlanda.

Poder, política y ceremonias

Durante siglos, el castillo de Dublín fue el centro del dominio británico en Irlanda. Aquí, los virreyes gobernaban con esplendor, se celebraban grandes banquetes y las decisiones que afectaban a todo el país se tomaban tras pesadas puertas de madera. Cuando Irlanda obtuvo la independencia en el siglo XX, el papel del castillo cambió radicalmente: ahora es lugar de actos estatales, como inauguraciones presidenciales y ceremonias oficiales.

Paseará por salas que han acogido a dignatarios extranjeros y jefes de Estado, pero que también resonaron con susurros de rebelión y resistencia. Los Apartamentos de Estado, con sus relucientes lámparas de araña y su fastuosa decoración, son uno de los lugares más destacados.

Qué ver y hacer

Comience con una visita guiada: es la mejor manera de apreciar las historias ocultas tras las grandes fachadas. Destacan los Apartamentos de Estado, la Capilla Real gótica, con sus intrincadas yeserías, y el sótano medieval, donde se pueden ver restos de defensas vikingas y normandas.

Los jardines de Dubhlinn, detrás del castillo, ofrecen una escapada tranquila, y el nombre de "Dubhlinn" es el que da nombre a la ciudad de Dublín: proviene del antiguo "estanque negro" que había en este lugar.

También puede asistir a alguna exposición o evento, ya que el castillo acoge regularmente exposiciones de arte y festivales culturales a lo largo del año.

Consejos prácticos

El Castillo de Dublín está abierto todo el año y es de fácil acceso a pie desde cualquier punto del centro de la ciudad. Las visitas guiadas son frecuentes y merece la pena participar en ellas. Las entradas pueden reservarse en línea o comprarse in situ. Tómese al menos una hora y media para explorarlo por completo y no olvide visitar la tienda de regalos, donde encontrará artesanía irlandesa.

Consejo

Para pasar una tarde perfecta, combina tu visita al castillo con un paseo por la cercana Dame Street o haz una parada para tomar un café en la cafetería del castillo. Mejor aún, programe su visita por la mañana para evitar las multitudes de turistas y empaparse del silencio de los Apartamentos de Estado antes de que el día se ponga ajetreado.

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